Es el cumpleaños de tu novia o novio, tienes un familiar
enfermo, quieres hacer un regalo y no sabes que, etc. Estas son las principales
circunstancias en las que podemos acabar regalando flores. Yo desde aquí os
quiero invitar a una reflexión que hace poco me hice: si regalo un ramo de
flores, la persona se pondrá muy contenta pero en una semana mi ramo acabará en
la basura. Esto que acabo de decir no quita el encanto de un buen ramo de
rosas, pero también es cierto que si regalo un buen ramo de flores va a ser un
regalo efímero y temporal.
Por ese motivo, desde hace algún tiempo ya no regalo flores,
pues ya siempre regalo plantas. Esto lo hago para que la persona que recibe mi
regalo se acuerde de mi cada vez que llegue a casa y vea la planta verde y
bonita, y a ser posible llena de flores.
Si te he convencido con lo que he dicho, te voy a dar unos
pequeños consejos para que tu elección sea todo un éxito:
- Si quieres hacer pedazo regalo, yo te aconsejo un bonsái, pues según mi experiencia es lo que más ilusión hace a la gente. Los bonsáis suelen ser algo más caros que el resto de las plantas pero aun así los podemos encontrar de casi todos los precios.
- Si no nos importa gastarnos algo más, es una combinación perfecta al incluir en nuestro regalo un libro de cómo cuidar las plantas de interior, si no sabéis ni por dónde empezar, os dejo una web donde informaros: cuidados de las plantas de interior.
- Si no queréis gastaros mucho, os aconsejo elegir plantas de temporada. Son las más espectaculares (porque son las de temporada) y generalmente son las más baratas.
- Si queréis un regalo sofisticado, decantaros por las orquídeas. Aunque la persona que la reciba no tenga ni idea de las plantas, seguro que sabe identificar que es una orquídea y que es cara.
Espero que os hayan gustado estos consejos, ya veréis como
no fallan.
